lunes, 10 de agosto de 2015

ROSQUITOS INTEGRALES DE ANÍS, CANELA Y LIMÓN



Todos los que dedicamos una buena parte de nuestro tiempo a cocinar y disfrutamos con ello, tenemos alguna u otra receta con la que conseguimos reconciliarnos con nuestro pasado, esas recetas de nuestras madres, de nuestras abuelas, que nos han venido acompañando desde que tenemos uso de razón y que seguimos preparando una vez tras otra, porque nos garantizan no defraudar.
Como ya os comentaba en la entrada anterior (y en varias más, qué pesada..), en mi casa los dulces y postres nunca faltaban: Bizcocho, tortas, arroz con leche, natillas, yogures... Pero si hay alguna receta con la que disfrute especialmente, tanto mientras la preparo como mientras nos la comemos después, esa es la receta de rosquillas de anís de mi yaya Milagros. Un dulce que repito y repito hasta la saciedad y nunca me canso de hacerlo; Una receta a la que siempre acudo cuando me siento nostálgica y que nunca me falla; Una receta que me devuelve a la infancia, a aquellas maravillosas tardes de lluvia amasando y friendo u horneando rosquillas hasta las tantas y para un regimiento (y no es que seamos muchos, qué va, es que nos las comíamos de dos en dos...); En definitiva, una receta tradicional, familiar, de toda la vida, y con mucha, mucha carga emocional, pero de la buena.
Vaya, qué más os puedo decir al respecto... Versiones de las rosquillas caseras hay tantas como abuelas: fritas, al horno, con ralladura de limón, con ralladura de naranja, con canela, con anís... De una forma u otra, las rosquillas caseras son un bocado delicioso y sencillo que, muchas veces, no nos quitan más de 30 minutos de tiempo y que podemos preparar con ingredientes básicos de nuestra despensa.
Esta vez, y para poder darme un capricho sin tener luego que privarme de otras cosas, he añadido un par de cucharadas de salvado a la masa y, la verdad, el resultado ha sido casi idéntico a el que me ha dado las tropecientas mil veces que he hecho rosquillas anteriormente. Las hice ayer, rondando el medio día, y deben quedar 3 o 4, a los sumo, imaginaos. Y es que sentarse a media tarde con un café o un té e intentar comerte sólo un par es casi misión imposible, doy fe.
Así que, yaya, va por ti.
Os dejo los ingredientes y la preparación.




Ingredientes (para unas 20 rosquillas aproximadamente):
- 150 gramos de harina leudante
- 2 cucharadas de salvado de avena
- 1 huevo
- 40 gramos de azúcar moreno + un poco más para rebozar
- 50 ml de aceite de oliva suave
- 25ml de anís 
- 1 cucharadita de anís en grano
- Media cucharadita de canela.
- Ralladura de limón (opcional)

- Antes de empezar, pre calentamos el horno a 180º.
- Colocamos la harina en un bol grande y añadimos el huevo ligeramente batido, el aceite, el anís en grano, la copita de anís, la ralladura de limón, la canela y el azúcar.
- Mezclamos todo bien hasta que resulte una masa que no se pegue a las manos. Tapamos y dejamos reposar en un lugar cálido unos 30 minutos.
- Pasado este tiempo, estiramos la masa con las manos y vamos formando las rosquillas. 
- Vamos pasando las rosquillas por el azúcar (opcional) y las colocamos en una bandeja de horno cubierta con papel de hornear.
- Horneamos durante unos 20 minutos aproximadamente, o hasta que las rosquillas estén hechas. Lo sabremos porque el azúcar habrá caramelizado.
- Dejamos enfriar y servimos.




Notas:
- En vez de hornear también podemos freír las rosquillas. En este caso, lo haremos en tandas de 5-6, a fuego medio para que se hagan bien por dentro y no se quemen por fuera, y con aceite de girasol nuevo.
- Dependiendo del día, en casa solemos rebozar las rosquillas con azúcar y canela o con miel, y siempre cuando aun están calientes. Eso va a gustos.
- La manera más tradicional de degustar estas rosquillas es con una copita de anís o vino moscatel, pero resultan ideales para acompañar el café, el té, etc.

¡Feliz lunes!

12 comentarios:

  1. Me llevo dos para la merienda..Que ricas!!

    ResponderEliminar
  2. Hola Debora, qué rico acompañamiento para el café nos traes hoy... A mi también me traen muy buenos recuerdos las rosquillas, pareciera que las estoy oliendo ahora mismo... Te han salido muy bien, con salvado incluido y todas sus buenas propiedades, así que no puedo menos que felicitarte por estos saludables y deliciosos rosquitos. Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Alicia!
      Uf, no me hables del olor, que cuando las estoy haciendo no me separo del horno ni un momento, qué cosa más buena.
      Me alegro que te gusten, y gracias de nuevo por tu vsita. Un beso.

      Eliminar
  3. Menudo de ricas se ven estas rosquillas para acompañarlas con un cafetito huuuu.Bs

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues si Doris, a media tarde sientan de maravilla.
      Un beso.

      Eliminar
  4. Te han quedado muy buenos, y con ese sabor anis, me encantan,besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Los dulces con anis son mis favoritos Adita, estar muy muy buenos. Un beso y gracias.

      Eliminar